LIFE-IP NAdapta-CC realiza un informe sobre las actuaciones de regeneración urbana en Sakana y Larraun/Leitzaldea

Los ayuntamientos de ámbito rural en Navarra son conocedores de los efectos del cambio climático gracias a las distintas acciones desarrolladas bajo el proyecto LIFE-IP NAdapta-CC.

En concreto en la acción C6.9 de dicho proyecto, que sigue las líneas de actuación descritas en la Hoja de Ruta desarrollada en la acción C6.5, busca la puesta en marcha de una estrategia de regeneración energética, mediante políticas que respondan a las necesidades reales de los entornos construidos de Navarra, en función de sus características físicas y socio-económicas.

Con el objetivo final de adaptación al cambio climático de ámbitos a escala local en municipios rurales, se han elaborado distintos Proyectos de Intervención Global (PIG) en distintas localidades, con poblaciones inferiores a los 5.000 de la Comunidad Foral. Concretamente en las comarcas de Sakana y Larraun/Leitzaldea.

Es por ello, que el equipo de regeneración urbana de la empresa pública Nasuvinsa, está trabajando con ayuntamientos y ciudadanía de las comarcas de Sakana y Larraun-Leitzaldea. Durante el año 2022 se han llevado a cabo numerosas reuniones con los distintos ayuntamientos, y se han redactado los PIG para cada una de las áreas vulnerables previamente identificadas, a través del visor de vulnerabilidad desarrollado en la acción C6.5 del proyecto LIFE-IP NAdapta-CC y que sirve para caracterizar según su vulnerabilidad física, social y económica los distintos entornos de Navarra.

Con la redacción de esos PIG se estudian y proponen las posibles medidas de adaptación al cambio climático de esos entornos residenciales de esos ámbitos rurales seleccionados.

Un PIG se ofrece una solución conjunta al proceso de regeneración energética del entorno, a modo de plan director, con el objetivo de que se pueda facilitar la puesta en marcha de futuros procesos de rehabilitación de los distintos bloques de viviendas, con criterios de adaptación al Cambio Climático.

Cada proyecto tiene que estar apoyado por los servicios municipales y por los propios vecinos. Por ello, el PIG contiene los siguientes documentos:

• Diseño preliminar que contiene una memoria justificativa, planos arquitectónicos, estudios energéticos de los edificios, presupuestos y estudios de viabilidad, y soluciones constructivas propuestas.

• Participación local y ciudadana que garantice la toma de decisiones.

Como resultado del estudio energético de las tipologías, se estima que se producirán ahorros energéticos de hasta el 59%.