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El MITECO anuncia 20 millones de euros en ayudas de emergencia por las inundaciones en la Cuenca del Ebro

Dentro del proyecto LIFE-IP NAdapta-CC, se están realizando diversas acciones en materia de agua, entre las que se encuentra la elaboración planes de emergencias ante el riesgo de inundación en distintas localidades de Navarra.

20-01-2022


Responsables del Gobierno de Navarra, del Ministerio de Transición Ecológica y el reto Demográfico (MITECO) y de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) han analizado recientemente los daños ocasionados por las inundaciones y el plan de medidas que se van a acometer tanto con carácter de urgencia, como a medio y largo plazo, con el fin de minimizar daños. El encuentro, celebrado el pasado 10 de enero, estuvo presidido por la Presidenta de Navarra, María Chivite, y por la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera. Por parte de la CHE, la delegación la encabezaba su presidenta Dolores Pascual.

La Presidenta Chivite recordó los datos principales de las inundaciones del pasado diciembre: 10.000 hectáreas de cultivo y 133 localidades afectadas, con una estimación de daños por parte del Consorcio de Seguros de 60 millones de euros, según ha informado la ministra Ribera. Y subrayó la disposición de las administraciones central y foral y de los ayuntamientos para acometer coordinadamente ciertas medidas.

Así, se trabaja ya en una primera fase de actuaciones urgentes, con una inversión de 10 millones de euros. A esto se suman otros 10 millones de euros recogidos en un Real Decreto de ayudas a la adaptación al riesgo de inundación en el tramo afectado por las inundaciones en Navarra, Aragón y La Rioja, que se aprobará en las próximas semanas y cuyo objetivo es que las edificaciones públicas y privadas se adapten al riesgo de inundación evitando la entrada de agua en los edificios, los daños en instalaciones agropecuarias, etc.

La reparación de motas e infraestructuras básicas son los trabajos que se van a acometer, con carácter de urgencia, a la mayor brevedad posible. También, de forma prioritaria, se va a agilizar la concesión de las ayudas para los bienes afectados, cuyo plazo de solicitud está abierto hasta finales de febrero.

36 millones para acciones a largo plazo en Navarra

Desde 2018 el MITECO ha invertido 5,2 millones de euros para recuperar el espacio y mejorar la dinámica fluvial en Navarra y ahora se encuentran en ejecución otros 5,4 millones dentro del proyecto LIFE Ebro Resilience, que supondrá una inversión total en la Comunidad de 36 millones en los próximos cuatro años, según anunció la vicepresidenta Teresa Ribera.

Este plan, destinado actuaciones a medio y largo plazo en el curso del Ebro, tiene como objetivo mejorar el sistema de predicciones del comportamiento del río para poder prevenir inundaciones y realizar adaptaciones en el terreno para minimizar los daños al máximo.

Planes de emergencia ante el riesgo de inundación.

Los planes de emergencia municipales ante riesgo de inundación se enmarcan dentro del proyecto europeo LIFE-IP NAdapta-CC, de adaptación al cambio climático en la Comunidad Foral de Navarra, que lidera el propio Gobierno y que, entre otras acciones, incluye la redacción de 17 de estos planes, junto con la implantación de herramientas informáticas para su gestión. Dichos planes, elaborados por la empresa pública Gestión Ambiental de Navarra–Nafarroako Ingurumen Kudeaketa (GAN-NIK), adscrita al Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, buscan mejorar la gestión de episodios de inundación y fomentar la autoprotección de las personas y las comunidades de manera que se minimicen los riesgos y amenazas derivadas de las inundaciones.

Estas acciones buscan aumentar la adaptación a los peligros relacionados con el agua ya que pueden ser excepcionalmente destructivos y más frecuentes debido al cambio climático. La divulgación y el conocimiento de este impacto lleva a una mayor preparación para la prevención de estos episodios que, aunque inevitables, sí se pueden prevenir, y reducir, en la medida de lo posible, los daños materiales que pudieran ocasionarse como consecuencia de avenidas extraordinarias, a través del fomento de la autoprotección y la puesta en marcha de este tipo de planes.